El dirigente palmero, José Luis Pérez, afirma que la visión antiecológica del monocultivo de palma africana es “importada” por lo que sucede en Asia, y asegura que hay “un impacto ambiental positivo”, porque ayuda a la absorción de CO2.

CAMPECHE, Cam. 6 de marzo del 2020.- El presidente ejecutivo de la Federación Mexicana de Palma de Aceite (Femexpalma), José Luis Pérez Vázquez Aldana, aseguró que no se han deforestado selvas, de manera “importante”, para establecer plantaciones de palma africana en el sur de Campeche y manifestó que el indiscriminado uso de plaguicidas en este monocultivo es un “mito bastante fuerte”.

El dirigente palmero reconoció que donde ha habido un desarrollo irresponsable del establecimiento del cultivo de la palma de aceite, ha sido en el sureste asiático, “y a México se ha importado esa imagen y esa visión del cultivo, que es totalmente equivocada”, que con el Segundo Congreso Palmero Mexicano se intenta contrarrestar.

“La realidad mexicana es una realidad distinta a como ha sido en Asia, en todo el mundo, porque aquí en México se ha venido a sustituir otros cultivos, es decir, no ha habido una deforestación importante de selvas o de bosques tropicales, es lo que más ha sido sustitución de cultivo de arroz, de banano, a palma, sobre todo porque es el 85 por ciento de los casos de ganadería a palma”, expresó.

“Realmente, la utilización de agroquímicos, el manejo de la palma también hay un mito ahí bastante fuerte alrededor de este tema, si vemos que proporcionalmente la cantidad de agroquímicos que se utilizan, digamos para el aceite de palma, comparado con otras oleaginosas es sumamente bajo”, puntualizó.

Vázquez Aldana manifestó que el cultivo de la palma africana ha tenido un impacto ambiental sumamente positivo, con lo que desestimó todas aquellas denuncias que se han hecho sobre los químicos que llegan al río Candelaria y luego a la Laguna de Términos.

Argumentó que la palma africana tiene absorción de bióxido de carbono, porque la palma, como cualquier planta perenne, va a ir capturando bióxido de carbono del medio ambiente y tiene una mitigación de este gas de infecto invernadero.

“También vemos que tiene un impacto positivo en la biodiversidad de la región, porque al generarse un ambiente similar al bosque, distinto a una pradera abierta, como lo es un pastizal, donde vemos varias especies animales han podido transitar, porque se encuentran a cielo abierto”, indicó.

El líder palmero mencionó también el cultivo de la palma de aceite se ha convertido en un catalizador de desarrollo social y económico, indudable e indiscutible.

“Es un cultivo bastante robusto, es un cultivo que hasta me atrevo y te diría que esto no salga publicado, es un cultivo a prueba de ingenieros agrónomos, por lo que es un cultivo resistente a las inclemencias del tiempo, inclusive, que es muy generoso, a pesar de que se tenga un manejo técnico pobre”, asentó.