El presidente advierte que quien va a decidir el futuro de las nuevas generaciones es el pueblo, en una decisión libre y soberana, e insiste en que “lo más importante es el proceso de purificación de la vida pública, el que no se repitan hechos abominables, el saqueo, la corrupción”.

Por Daniel Sánchez

ZAPOPAN, Jal. 16 de julio del 2020.- El presidente Andrés Manuel López Obrador señaló que los escritores y periodistas neoliberales y neoporfiristas, que lo acusan de autoritario, añoran el regreso de la podredumbre que prevaleció en el país durante más de 30 años.

“Están en su derecho, porque vivimos en democracia. ¿Quién va a decidir? El pueblo, el pueblo de manera libre va a decidir qué quiere hacia adelante, cómo quiere labrar su destino, el de su familia, el de sus hijos, el de las nuevas generaciones, es una decisión libre, soberana”, expresó.

Por eso, indicó, “lo de la llegada del señor (Emilio) Lozoya (ex director de Pemex) va a ayudar mucho. Lo mismo el caso de este señor (Tomás) Zerón (director de la agencia de investigación de la PGR). Imagínense, un jefe de policía dirigiendo una tortura. ¡En qué país vivíamos!”

“Imagínense que el secretario de Seguridad Pública del gobierno de Felipe Calderón (Genaro García Luna) tenía acuerdos con una de las bandas de la delincuencia, el secretario de Seguridad Pública. Y así estaba podrido el régimen”, puntualizó.

El jefe del Ejecutivo federal afirmó que “lo más importante es el proceso de purificación de la vida pública, el que no se repitan estos hechos abominables, que no se repita el saqueo, nunca más la corrupción, que no impere la corrupción, que nadie se atreva a decir, como sucedió, que la corrupción era parte de la cultura del pueblo de México, ofendiendo a la inmensa mayoría de los mexicanos”.

“No sólo es el proceso judicial, sino el ejemplo, el que no se celebre, no se festeje al corrupto, sino que se le estigmatice. Esto tiene que ver mucho con la transformación, porque antes se llegaba a extremos de decir que, si no se transaba, no se avanzaba”, recordó.

“Llegaba un servidor público a ocupar un cargo y si no robaba era tonto, se llegó en algunos casos, no en todos afortunadamente porque el pueblo de México tiene muchos valores y es un pueblo honesto, pero en algunos casos se le llegó a decir a los hijos: ‘Estudia para que cuando seas grande seas como don Fulano, un reverendo ladrón’”, agregó.

“Un político también famoso, finado, decía que político pobre, pobre político; otro político, también finado, parte de la picaresca política mexicana decía que la moral era un árbol que daba moras y que servía para pura… eso”, asentó.

El mandatario nacional dijo que eso “era lo que predominaba, triunfar a toda costa sin escrúpulos morales de ninguna índole y de inmediato llegaban a los cargos, residencias lujosas, sus departamentos en Nueva York, las zonas más exclusivas en Miami. Eso de Miami era como tener una casa en cualquier colonia popular de nuestras ciudades, era lo más común, eran hasta vecinos en departamentos”.

“¡Cuánto daño le hicieron al país con eso! De ahí las deudas, de ahí que no alcance el presupuesto, de ahí, sobre todo, la desigualdad monstruosa del país, porque la causa principal de la desigualdad es la corrupción política. No hay que tener ninguna duda al respecto. La profunda desigualdad que hay en México se le debe a la corrupción, porque unos cuantos se robaban el dinero y los bienes del pueblo, de la mayoría de la gente”, insistió.

“Yo ya no quiero volver a ocuparme de estos asuntos porque sí están en el límite de lo político-electoral y no quiero bajarme a la arena política-electoral por respeto a la investidura presidencial; sin embargo, lo tengo que hacer porque soy señalado y tengo que utilizar mi derecho de réplica, además es bueno el debate democrático”, añadió.

-¿Cada que aparezca un desplegado de este tipo, señor presidente, va a dar de la réplica?

– Pues yo creo que sí, si me involucran pues voy a ejercer mi derecho de réplica ¿O creen ustedes que no debo hacerlo?, que estaría bueno preguntarle a la gente si me tengo que quedar callado. Para mí va a estar difícil porque siempre digo lo que pienso, pero a lo mejor eso también se pone a consideración de la gente; y si la gente recomienda que yo no responda, no lo haría.

-Porque lo pueden estar provocando.

– Sí, pero no voy a todas, porque si no, no trabajaría. Imagínese, sin presumir, soy el presidente más atacado en los últimos 100 años, diario son ataques. Es un timbre de orgullo porque quiere decir que vamos avanzando.