En el debate en el Senado, la senadora Sansores San Román señala que la Ley “golpista”, enviada por Enrique Peña Nieto “para sembrar miedo, impotencia y rabia”, “es preludio de dictadura, de la militarización del país”, y a las fuerzas armadas, “da licencia para matar y violar derechos humanos”.

Por Daniel Sánchez

CIUDAD DE MÉXICO, 14 de diciembre del 2017.- “Es una ley de mierda”. Con esta frase lapidaria y ruda inició su intervención la senadora Layda Sansores San Román, durante el debate en el Senado de la República sobre la Ley “golpista” de Seguridad Interior, que se preparaban para aprobar, esta noche, los senadores del PRI y sus aliados.

“Esta ley expresa la vileza de un hombre débil, arrodillado ante los Estados Unidos y al poder militar, que en los estertores de su desprestigiado mandato, vino aquí a sembrar miedo, impotencia y rabia; esta ley es preludio de dictadura, de la militarización del país, lo quieran reconocer o no”, puntualizó.

En una sesión sin quórum legal, la legisladora campechana recordó las palabras del General Francisco J. Múgica sobre la militarización del país, hace un siglo, quien advirtió que a primera vista, no hay amenaza, pero cuestionó “qué pasará en este marco, que le dejan que se autogobiernen” las fuerzas armadas.

Aseguró que el priísta Enrique Peña Nieto exhibe su cobardía y usa al Congreso de la Unión, que “es una vergüenza, cada vez más degradado”.

“No es para blindarse, les preocupa proteger los intereses transnacionales y temen protestas ciudadanas, porque la ciudadanía no permitirá más fraudes, como pretenden en el 2018”, advirtió.

“Peña quiere un ejército privado, quiere salvar el pellejo, ante su corrupción; Peña es un cobarde, tiene las entrañas de gallina”, apuntó y anunció que los ciudadanos habrán de acudir a la Suprema Corte de Justicia de la Nación y a organismos internacionales, porque “se cerró esta puerta, pero hay otras”.

Sansores San Román manifestó que las modificaciones que se hicieron en el Senado a la minuta de Ley de Seguridad Interior, enviada por la Cámara de Diputados federal, “son una burla”.

“Peña Nieto pidió respetuosamente y ante su presión para lavarse la cara, que se hicieran las consultas y ustedes oyeron, pero no escucharon a las organizaciones civiles que estuvieron en el Senado”, indicó.

“Queda claro que todo esto es un maquillaje, que no sirve para nada, que fue una simulación y no cambió la esencia, pero ustedes los senadores, en su mayoría, dejan su fama de serviles e inútiles, por no hacer contrapeso y esa es nuestra función principal”, asentó.

Afirmó que “nunca un ordenamiento de seguridad había provocado tanta inseguridad y tanto miedo en la ciudadanía, ni tantas recomendaciones de organismos nacionales e internacionales”.

“El Congreso fue sordo a la advertencia, esta ley irrumpe el orden constitucional, da licencia para matar y para violar los derechos humanos ¡Ya lo verán! No es buena ni para las fuerzas armadas, ni para los ciudadanos, ni para nadie, es un desafío a organismos internacionales”, alertó.

La senadora citó como ejemplo de violación a derechos humanos, el artículo 31 de la Ley, en el que se establece que los organismos autónomos, como la Comisión Nacional de Derechos Humanos, deberá proporcionar información sobre los quejosos, como en los casos trágicos de Ayotzinapa, Tlatlaya, entre otros.

“Dejamos en la indefensión a los ciudadanos, se acaba con todo, con las secrecías y no nos damos cuenta que esto es violación a los derechos humanos. Le estamos dando cada vez mayores atribuciones. Once años nos hemos pasado en una guerra que no pedimos, no les dieron tiempo a las fuerzas policiacas para que se reforzaran y fortalecieran”, expuso.

Mencionó que a la par de la Ley, debería presentarse un plan concreto, por escrito, sobre el retiro gradual de las tropas, sobre cómo se va a capacitar a los policías, cómo se va a capacitar a las fuerzas armadas.

“Creen que porque lo dicta la ley, su mentalidad va a cambiar, como el secretario de la Defensa Nacional, el General Salvador Cienfuegos Zepeda, lo dijo textualmente: “Hemos sido preparados para matar, no para detener”.

Recordó el comportamiento arrogante del general que vino a defender la nueva normatividad, “y eso que aún no se aprueba la ley”, y comentó que “en un momento de lucidez, reconoció, muy diplomáticamente, que la labor del ejército no había sido exitosa, debería haber dicho que fue un fracaso”.

“En 11 años, no se atendieron las causas que originaron la violencia, y díganme dónde están estas estrategias integrales que van a atender el crimen, no nada más la ley con las líneas que les dictaron”, reiteró.

Aseveró que es una estrategia imperialista, porque los Estados Unidos “nos venden las armas, consumen las drogas y nosotros ponemos los muertos y estamos librando una guerra que no merecemos. Están con su estrategia de que hay que combatir la delincuencia cuerpo a cuerpo, bala a bala, y dar indulgencia plenaria para los militares”.

“¿Cuándo han rendido cuentas, nunca, quién los va a controlar, cuándo han venido a rendir cuentas a este Congreso? Ahí van los senadores a recibir instrucciones a donde ellos los citen”, cuestionó.

“Aquí, no solo ahora, nunca en la historia, ha venido un secretario de la Defensa o de la Marina a rendir cuentas al Senado de la República, como se hace en los Estados Unidos”, lamentó.

“Con toda esta impunidad y sin controles, oiremos hablar de ejecuciones extrajudiciales, que en la historia oficial se declaran como enfrentamientos y se sabrá de más desaparecidos, ahorcados, golpeados, cuerpos arrojados al mar, crujir de huesos en cuarteles militares”, insistió.

Layda Sansores aclaró que no está en contra de las fuerzas militares, y “aquí se envuelven en la bandera, y no dicen por qué está aprobando esta ley, esta mierda”.

“Las fuerzas armadas han tenido una misión y lo reconocemos, pero no para que sean utilizadas como policías, ellos no están preparados, esta ley es para que no haya controles y hagan lo que quieran”, añadió.

“Esta ley no es para darle certidumbre a las fuerzas castrenses, sino para que puedan autogobernarse y para que Peña pueda blindarse, esta ley es una tragedia para México, estamos indignados, traemos el llanto degollado, la rabia, NO a la ley golpista, y a ustedes senadores sátrapas, les sobrevivirá la vergüenza”, concluyó.