INAH registra vestigios del Camino Real y tren porfiriano en Campeche/Destaca el hallazgo de un antiguo leguario y los avances del Promeza en Edzná y Xcalumkín. FOTOS INAH.
Por Daniel Sánchez
CIUDAD DE MÉXICO, 22 de julio del 2024.- El Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) reveló el descubrimiento de un nuevo sitio arqueológico maya en la región del Camino Real del estado de Campeche.
El director general del INAH, Diego Prieto Hernández, informó que como parte de las tareas de salvamento arqueológico en el tramo 2 del Tren Maya, que comprende de Escárcega a Calkiní, se identificó y registró por vez primera el sitio Santa Cruz N..
En la conferencia matutina presidencial, el funcionario federal no citó la localización de la nueva zona arqueológica maya, “para su salvaguarda”.
Prieto Hernández dijo que diversas modificaciones del paisaje en la región campechana, que datan del periodo novohispano y de los siglos XIX y XX, se registraron durante las tareas de salvamento arqueológico en el tramo 2 del Tren Maya.
Detalló que se descubrieron vestigios del Camino Real, el cual unía las ciudades de Campeche y Mérida, caso de un leguario (monumento de mampostería que marcaban las leguas); del primer ferrocarril de vapor en el gobierno de Porfirio Díaz, cuyo trazo se vinculaba a las haciendas henequeneras del norte de Campeche; y de la infraestructura edificada en el siglo XX, a partir del mandato del presidente Lázaro Cárdenas del Río.
Señaló que, como resultado de los esfuerzos conjuntos del INAH, el Fondo Nacional de Fomento al Turismo y otras entidades gubernamentales, con el apoyo del consorcio Carso, se ha llevado a cabo un rescate pormenorizado de toda esta evidencia material, por lo que “es falso, como han asegurado algunos medios, que haya alguna clase de destrucción del patrimonio histórico o cultural”.
En ese sentido, aseguró que, dada su importancia para la investigación científica, se logró la preservación de ocho zonas de monumentos, y otros hallazgos significativos tuvieron lugar en las ciudades mayas de Cansacbé, Calakmul, de Tenabo, Sacamukuy y Poc-boc.
“El trabajo exhaustivo de diversos especialistas se refleja en el volumen de datos e información procesada. Se revisaron 11 mil 770 hectáreas mediante tecnología LiDAR y se prospectaron dos mil 570 hectáreas”, precisó.
“Asimismo, se recorrieron y documentaron 235.4 kilómetros, para cumplir con la normatividad del INAH. En este proceso, se intervinieron mil 32 monumentos inmuebles y se atendieron dos mil 454 casos de geotecnia, coadyuvando al estudio de las condiciones del suelo para la construcción de la vía férrea y asegurar la preservación de los sitios arqueológicos”, agregó.
De manera paralela –continuó Prieto Hernández–, se trabajó en 309 bancos de materiales y otras obras complementarias. Fueron procesadas más de 296 mil imágenes mediante fotogrametría, se realizaron tres mil 900 horas de vuelos de dron y se registraron alrededor de 178 mil puntos topográficos. A su vez, se dibujaron más de 270 mil metros cuadrados y 18 mil metros lineales, y en geomática, se registraron 103 mil puntos en el Sistema de Información Geográfica.
Mejoran Edzná y Xcalumkín
El titular del INAH también destacó los alcances del Programa de Mejoramiento de Zonas Arqueológicas (Promeza) en los sitios de Edzná y Xcalumkín, donde se realizaron trabajos de conservación en prácticamente la totalidad de los edificios excavados en años anteriores, y se exploraron y restauraron nuevas estructuras que permitieron ampliar las áreas abiertas a la visita pública.
Es así como, hace unas semanas, se inauguró el Museo de Sitio de Edzná, el cual no solo alberga monumentos esculpidos, como una docena de estelas, sino que ofrece una visión renovada de su historia prehispánica. También, se edifican dos Centros de Atención a Visitantes (Catvi), que permitirán ofrecer servicios complementarios, así como vincular a las zonas arqueológicas con sus comunidades vecinas.
En conjunto, concluyó Diego Prieto, estos esfuerzos demostraron un compromiso profundo con la conservación del patrimonio cultural y natural, asegurando que avance la construcción del Tren Maya, tanto en términos de infraestructura moderna, como en la preservación y respeto por la historia rica de Campeche.