Luego de 57 días en prisión, el autor de Bestiómetro, Miguel Ángel Villarino, deja la prisión preventiva, a la que injustamente fue sometido, e insiste en responsabilizar a Alejandro Moreno Cárdenas de su encarcelamiento.

Por Daniel Sánchez

CAMPECHE, Cam. 5 de mayo del 2018.- Por fin, la justicia federal le corrigió la plana al Tribunal Superior de Justicia del Estado, al servicio de Alejandro Moreno Cárdenas, y ordenó la liberación del periodista crítico, Miguel Ángel Villarino Arnábar, quien tuvo que purgar injustamente 57 días de prisión en el penal de San Francisco Kobén.

La mañana de este viernes, la jueza Miriam Collí Rodríguez tuvo un “ataque de honestidad judicial”, provocado por el amparo concedido por la justicia federal al columnista, y reconoció tácitamente haberse propasado con la imposición de la medida cautelar de prisión preventiva contra Villarino Arnábar, por delitos menores, con casi casi un “usted disculpe”.

Tal como ordenó el Juzgado federal, “su señoría”, según el protocolo decimonónico en este “moderno” sistema de justicia penal, tuvo que retractarse de su primera determinación y ordenó tres medidas cautelares contra el detenido: No salir del país, no acudir al domicilio o la escuela de su hijo y no acercarse, ni comunicarse con la víctima, en este caso, su vástago.

El abogado de la parte acusadora todavía pretendió un atentado más a la libertad de pensamiento y a la libertad expresión, al pedir a Miriam Collí que prohibiera a Miguel Ángel Villarino, mientras durara el proceso penal, escribir y publicar sobre el caso. El abogado defensor se opuso y la juzgadora precisó que bajo ninguna circunstancia, se podría resolver algo así.

Finalmente, se fijó para el 11 de mayo la audiencia de cierre de las investigaciones del caso, pero la defensa pidió que se aplace por un mes más y también para el 11 de mayo, se fijó fecha para la audiencia donde se determinará si procede.

Fiscalía actúa tardíamente en denuncia por amenazas

A su salida de la sala de juicios orales, el periodista declaró que “el juez federal acaba de corregir una medida desproporcionada de la jueza, cuyas razones sólo ella y “Alito” tienen”, e insistió en responsabilizar a Alejandro Moreno de su encarcelamiento.

“Pero esto no ha terminado, yo todavía tengo que afrontar un proceso para recuperar a mi hijo, donde me estoy encontrando con dificultades, como, por ejemplo, que la Fiscalía está obstaculizando la entrevista de testigos y otras cosas, esto todavía va para largo”, expresó.

“Pero bueno, hoy se ha dado un salto, hoy tengo mi libertad, luego de dos meses, y a enfrentar lo que viene”, apuntó.

Manifestó que ya se dio un primer paso, pero dijo que “queda pendiente otro, el cuatro de abril, a mí me amenazaron de muerte en mi celda del Cereso, ese mismo día publiqué, ustedes mismos lo vieron, en la página Bestiometro.com, asimismo, fui con la directora y luego al departamento jurídico del penal, para solicitar la presencia de la Fiscalía”.

“Durante 15 días, la Fiscalía no fue, no hizo ningún intento por tomar mi declaración; fue mi abogado, Edwin Trejo, quien metió la denuncia penal en la Fiscalía y solo hasta el día de ayer, la Fiscalía se presentó para ratificar mi denuncia”, indicó.

“Ya me estoy encontrando con dificultades ahí también, porque resulta que al solicitar las grabaciones de las cámaras de seguridad, para probar que el guardia ingresó a mi celda, en horas que no debería haberlo hecho, resulta que la única cámara que no sirve en el penal hace seis meses, es la que precisamente apunta hacia mi celda”, puntualizó.

“Sólo queda que me acusen de maqueticidios”

Al preguntarle sobre la actitud tomada por la jueza Miriam Collí, luego de que la justicia federal la obligara a rectificar, Miguel Ángel Villarino todavía tuvo tiempo de bromear y señaló: “Lo acabo de descubrir, se llama sagacidad selectiva, pero bueno, por fin, lo hizo, ahora solo queda que me acusen de maqueticidios y me vuelvan a encerrar, pero bueno, ya veremos qué determinación toma el señor gobernador que, por supuesto, está detrás de todo esto”.