Alejandro Moreno, a través de la Sedeco, intenta evadir su responsabilidad en el retroceso económico registrado en el último trimestre del 2018 y responsabiliza al gobierno del presidente de México, por “frenar construcción de obras” y las “condiciones negativas de las políticas federales”.
Por Daniel Sánchez
CAMPECHE, Cam. 30 de abril del 2019.- Una vez más, la administración de Alejandro Moreno Cárdenas intentó evadir su responsabilidad en el retroceso económico registrado en el último trimestre del 2018 y responsabilizó al gobierno federal del derrumbe de las actividades económicas en el estado de Campeche, por frenar la construcción de obras y las “condiciones negativas de las políticas federales”.
A través de la Secretaría de Desarrollo Económico, a cargo de José Domingo Berzunza Espínola, Moreno Cárdenas emitió un comunicado, con el que pretendió asegurar que “Campeche mantiene crecimiento sostenido en actividades primarias y terciarias durante 2018”, pero sí admitió que la entidad caerá otro 1.3 por ciento en todo el año pasado.
El Instituto Nacional de Geografía y Estadística (Inegi) dio a conocer ayer el Indicador Trimestral de la Actividad Económica Estatal (ITAEE) e informó que Campeche cayó en 2.4 por ciento entre octubre y diciembre del 2018, con respecto al tercer trimestre del mismo año y 1.0 por ciento, con respecto al mismo trimestre del 2017.
El Inegi también manifestó que las actividades primarias repuntaron 2.4 por ciento, ocupando la entidad el décimo noveno lugar nacional y debajo de la media nacional de 3.0 por ciento, y las actividades secundarias reportaron un descenso, ahora de 1.1 por ciento, estando entre las 14 entidades federativas con números negativos.
Al excluir la minería petrolera, el indicador especifica que la caída es del 0.5 por ciento, lo que indica que Alejandro Moreno sigue fallando en el impulso a la industrialización de Campeche.
Las actividades terciarias no crecieron como han propagado una y otra vez las autoridades estatales, ya que retrocedieron 0.4 por ciento, estando entre las peores cinco entidades federativas del país.
En la Península de Yucatán, Campeche fue el único que retrocedió, al retomar la “caída libre” de la economía campechana en los últimos tres años y medio, ya que Yucatán y Quintana Roo presentaron crecimientos económicos de 3.6 y 3.7 por ciento anual, ubicándose en séptimo y noveno lugar nacional.
Desde que el 15 de septiembre del 2015, cuando tomó posesión Alejandro Moreno, la entidad campechana no ha dejado de estar en recesión económica, con excepción del tercer trimestre del 2018, demostrando que sus políticas públicas para reactivar la economía no han funcionado, y que ha sido un fracaso el Programa de Reactivación Económica, del que tanto hace mención la Secretaría de Desarrollo Económico.
El comunicado autoexculpatorio
En el boletín, Berzunza Espínola señaló que “las diversas acciones realizadas en los últimos años para lograr la diversificación económica del Estado han permitido mantener la estabilidad en el crecimiento de las actividades agropecuarias, de comercio y servicios”.
El funcionario estatal reconoció que “de acuerdo con el Inegi, las actividades secundarias fueron las que influyeron en el comportamiento negativo de la actividad económica estatal del último trimestre de 2018 y en el acumulado anual”.
Mencionó que esto es “debido, principalmente, a la actividad minera, que en nuestra entidad corresponde prioritariamente a la industria petrolera, además de la construcción, debido al freno de obras a nivel federal”.
Afirmó que “el reto que el país enfrenta es extraordinario. Especialistas han recalculado sus proyecciones a la baja, las señales y acciones que el gobierno federal ha enviado afectaron el comportamiento de los mercados de capitales”.
“Las cancelaciones de proyectos como el Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, generaron que firmas nacionales e internacionales revisen a la baja sus pronósticos, Bank of America Merrill Lynch pronosticó de 1 a 2 por ciento máximo y el Banco de México espera una expansión de nuestra economía de apenas 1.64 por ciento para 2019, las cuales son tendencias negativas que comenzarán a verse reflejadas en los estados”, explicó.
“Al inicio de la administración, la economía registraba una tasa de crecimiento negativa de -7.1 por ciento, la cual se vio afectada dada la crisis internacional del petróleo, misma que sumió a nuestra entidad en una caída para 2016 de -5.9 y en 2017 tocamos fondo al llegar a -10.5. Sin embargo, a dos años de dicho Programa, la caída de Campeche se ha contenido al reflejar una tasa de crecimiento anual que de manera preliminar asciende a -1.3 por ciento”, indicó.
“Se mantendrá el trabajo intenso para mantener la estabilidad económica de Campeche, pese a las condiciones negativas actuales de las políticas federales”, concluyó.
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