La exsenadora se reúne con la juventud morenista y los invita a acompañarla, porque viene “a darlo todo” contra “todos los otros candidatos que mueve el señor “Alito” y sus “costales de mañas”, como Rubén Moreira, el exgobernador de Coahuila.
Por Daniel Sánchez
CAMPECHE, Cam. 21 de noviembre del 2020.- Layda Sansores San Román llamó a los jóvenes morenistas a acompañarla con fuerza, con pasión, con corazón, en la décima campaña de su vida, porque viene “a darlo todo” y “nadie, ningún campechano bien nacido puede quedarse con los brazos cruzados”.
“Toda la lucha del 97 no puede quedar en cenizas, ese fuego que quedó del 97, ustedes tienen que avivarlo, tienen que convertir una hoguera en la selva, que esté ardiente siempre para que sea una convocatoria para todos los ciudadanos de Campeche”, expresó la exsenadora, ante decenas de adolescentes reunidos en su casa del barrio de Guadalupe.
“Nadie, ningún campechano bien nacido puede quedarse con los brazos cruzados, a cambio de ser señalado como un traidor, porque todos los otros candidatos los mueve el señor “Alito” y que no nos vengan a contar, que ya sabemos las mañas, necesitan que sus casas sean más grandes, más grandes y más grandes”, advirtió.
Sansores San Román identificó a sus adversarios como “costales de mañas”, “incluso algunos diríamos de la mafia política, que se robaron la voluntad de los ciudadanos, pero hoy trajeron a todos capitaneados con el señor (Rubén) Moreira, que se las sabe todas, pero no saben contra quiénes se enfrentan”.
“Este es un ejército que puede dar la vuelta, la juventud de Campeche, por ella vamos y no se cansen de ser predicadores y decir a cada uno, no, es tiempo, fueron años imposibles, muchos jóvenes los vi morir antes de perder la vida, estaban muertos, no hacían nada, no luchaban por nada, ni creían en nada, estaban muertos, fríos y miren, hubo la resistencia” civil, indicó.
Recordó que ha tenido la oportunidad de que el presidente Andrés Manuel López Obrador confía en ella y citó que le “tocó recorrer con él, la travesía en el desierto, los momentos más difíciles de la lucha, cuando no había nada, nosotros a él y él venía sin un vaso de agua, nosotros le poníamos el agüita y le poníamos el cafecito para que siquiera se llevara algo en el camino”.
“Nosotros lo hacíamos como podíamos, sin embargo, nadie pedía nada, luchábamos y perseguíamos un sueño, aprendimos a soñar despiertos y esto es lo que él creó en ustedes, esta decisión que me conmueve y me mueve el no darme por vencida jamás, cuando hay jóvenes como ustedes, con este calor, esta vibra, esta convicción, esta fuerza, señores, uno tiene más que resucitar y revivir lo mejor hay en uno mismo”, expuso.
“Lo hago ver porque estos son momentos que requieren mucho orden, mucha disciplina, y es un libro que tiene 25 siglos, pero no ha pasado de moda, este libro, “El arte de la guerra”, líneas que son fundamentales, el ejército victorioso debe ganar la batalla, debe ganar la guerra antes de pelear la primera batalla, imagínense tal sabiduría, ganar la guerra en la primera batalla, pues cómo, porque ya sabes organizarlo, sabes a qué vas, tienes que tener toda la estructura, las líneas de disciplina, la línea defensiva, cómo nos vamos a mover, cuántos somos, cuántos tenemos adentro, con qué contamos y tener la máxima del respeto”, explicó.
Manifestó que tuvo una reunión por la mañana, “bellísima, muy motivadora, encontrar a mis hermanos de la lucha del 97, llenos de recuerdos y de nostalgias”.
Y por eso, resaltó, “lo que quiero es pagarle a la vida y por eso tomé la determinación y además, Andrés Manuel nos enseñó que cuando uno pisa este camino de la lucha, uno ya no se pertenece…, pero siempre pensé que el comandante manda y que uno era un peón en este tablero de ajedrez, jamás le pedí un puesto, siempre creí que se trabaja por ideales y lo demás se da por añadidura”.
“Jamás imaginé que viviría la décima campaña de mi vida, la última batalla de mi vida va a ser en mi tierra”, agregó.
“No venimos a buscar el tiempo ni a ver qué se va a hacer, venimos a darlo todo y esta batalla se va a ganar, como decía acá una compañerita que tanto quiero, que está en Candelaria, vamos a entrar a la selva y si hay que buscarlos en los árboles, en los árboles, esta va a ser una batalla cuerpo a cuerpo y prepárense para eso, ahí debemos tener este espíritu esta mentalidad nueva, hoy tenemos que ver las cosas de una manera diferente”, puntualizó.
Definió que la juventud tiene que “ser rebelde con los mismos mecanismos del amor y creo que están muy ligados el sentimiento de la fraternidad, de los valores, de luchar por los que menos tienen, porque si nosotros nos sentimos mal, cuando vemos a otras comunidades, vemos que están peor, yo sí recorro mucho las comunidades y me ha tocado donde estoy, donde una vecindad viven 24 familias y solo tienen un inodoro para los 24, cosas que dices son infames”.
“No puede ser en este país de riquezas, donde haya tanta injusticia y también les queda decir que cuándo es que te haces rebelde, cuando conoces la injusticia y cuando se conoce la injusticia, te haces rebelde y te haces rebelde para siempre”, mencionó.
“Yo la conocí a mis cerca de9 años, nunca más dejé de ser rebelde, aquí me tienen todavía y que me dicen y qué Layda, si, la vida me dio para estar en la hamaca. No, esas son las necesidades, es el hambre del alma, la necesidad de servir al otro, yo sí conozco lo que es la pobreza y la miseria, le agradezco a mi padre que, desde niños, nos hizo acompañarlo a recorrer estos caminos de campesinos que estaban cuidados por los gobiernos y los usaban de alguna manera, ahí daban migajas, tenían al político, los recibían en su casa”, abundó.
“Ahora ni eso, son usados para las elecciones, se los juntaban cuando la luna no estaba puesta para que pusieran la semilla, la borrachera, los usaron por mucho tiempo, pero hoy las cosas han cambiado, ya no necesitan, todavía hay que cuidar, todavía quedan los de esa vieja guardia: te compró tu voto y me das una tajada”, añadió.
Layda Sansores insistió en que en los jóvenes, “está el futuro de Campeche en estos momentos, en ustedes mi mayor apuesta, ustedes son esta sangre nueva que está brotando de la tierra de una manera mágica, se hizo la magia en mi vida, cuando hoy los encuentro a tantos juntos, con tanta fuerza y corazón”.
“Esto puede determinar la victoria, vamos por ella, vamos por esa juventud, que no la concibo si no está llena de pasión, ya no los jóvenes que nada más ven pasar el desfile como testigos de piedra, que se vayan a otra galaxia no pertenecen a esta galaxia, aquí el joven tendrá que salir con toda la pasión que es dada y habrá que tomar la plaza, no vamos con miramientos, casa por casa, es nuestro y a defender cada casilla, cada voto, todo será nuestra responsabilidad”, instó.
“Así, apasionados, que les salga fuego por los costados, que la pasión se pare en ustedes en un lugar y sientan que algo vibra, porque se siente el hombre que está frío o el hombre que tiene fuego, ese fuego tiene que estar iluminando a los que están con nosotros, ustedes deben ser el gran contagio”, comentó.
“Esta es la hora que hay que convocarlos al combate, vamos a la lucha, vamos juntos, haciendo el equipo y el ejército más asombroso y más fuerte y poderoso que ha dejado Campeche, estoy convencido que nunca hubo un ejército de jóvenes convencidos, porque los del PRI, pues les pagan, les ponen la camiseta, la gorrita, les dan su buen salario, después le dan el puesto, porque probablemente es hijito de papá, entonces ustedes no, son los jóvenes que luchan por una proyección y una enorme esperanza, contagien a sus familias, contagien a sus compañeros, a maestros, ustedes van a ser los grandes maestros de esta nueva escuela que nos enseñó Andrés Manuel López Obrador de cada 100 años”, finalizó.