El director de Pemex, Octavio Romero, señala que con la reducción de la carga fiscal, de 65% a 54%, la empresa productiva del Estado tendrá un superávit financiero en el 2021, y así será “palanca del desarrollo nacional y garante de la soberanía energética”.
Por Daniel Sánchez
CIUDAD DE MÉXICO, 16 de julio del 2019.- El director general de Petróleos Mexicanos, Octavio Romero Oropeza, aseguró que en el año 2021, la empresa productiva del Estado alcanzará un superávit financiero y ya no tendrá pérdidas, con el Plan de Negocios 2019-2023, presentado este día.
“Para el 2020, básicamente son tres rubros: Uno tiene que ver con la refinería que son 41 mil millones, como te señalaba; otro tiene que ver con campos nuevos, son alrededor de 25 mil millones; y al que referí como el principal que tiene que ver con la reducción de la tasa de impuestos, que son 58 mil millones”, expresó.
“Con estos apoyos, ya este año se recibió un apoyo importante que señalaba yo, eran 30 mil millones; el próximo año, el 2020, es todo a lo que me referí, que son tres, y esto nos va a permitir que en el 2021, ya tengamos un superávit financiero, es decir, ya en ese momento Pemex empieza a no tener pérdidas”, indicó.
“Es muy corto el periodo, por eso tan importante el apoyo del gobierno federal en este momento, porque Pemex, con este apoyo de muy corto plazo, logra estos resultados”, puntualizó.
Ante el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, Romero Oropeza presentó el Plan de Negocios de Pemex 2019-2023, el cual fue aprobado por unanimidad por el Consejo de Administración y sienta las bases para modernizar a la empresa, hacerla más competitiva y garantizar su viabilidad financiera a largo plazo y con ello, consolidar a Pemex como palanca del desarrollo nacional y garante de la soberanía energética.
El titular de Pemex enfatizó que el plan establece las medidas para enfrentar los principales problemas estructurales que enfrenta la empresa: la elevada carga impositiva, su deuda y la baja inversión, dificultades que atraparon a la empresa en un círculo vicioso.
Precisó que con la estrategia y las medidas que se adoptarán mediante el Plan de Negocios, la empresa logrará su equilibrio presupuestario en el año 2021 y se prevé incrementar la producción a niveles de dos millones 697 mil barriles promedio diario en el último año de la presente administración.
En el documento, “Pemex deja clara su apertura a esquemas de negocio con el sector privado, bajo un estricto cuidado de sus intereses y con acuerdos justos y transparentes, dejando atrás las prácticas en las que Pemex siempre salía perdiendo”, expuso.
Aseguró que con el apoyo del Gobierno de México, Pemex tendrá un alivio en su carga fiscal, que le permitirá liberar recursos para detonar proyectos de inversión en la producción del petróleo. Cabe señalar que, como una primera medida, para el 2019 se amplió el beneficio fiscal en el pago de los derechos de producción de petróleo, a través de la publicación de un decreto que resultó en un beneficio del orden de 30 mil millones de pesos para este año.
Manifestó que el objetivo es que el gobierno de México apoye a Pemex los primeros tres años de la administración, en lo que será una etapa de transición para recuperar la producción de petróleo, para que, en la segunda mitad de la administración, sea Pemex quien apoye al gobierno federal para financiar el desarrollo y el crecimiento económico de nuestro país.
Indicó que, para resolver el problema de la elevada carga fiscal, el gobierno federal tiene previsto presentar una propuesta de reforma a la Ley de Ingresos sobre Hidrocarburos para reducir la tasa del derecho de utilidad compartida, a través de un esquema gradual de 7 por ciento para 2020 y de 4 por ciento para 2021. Es importante señalar que la tasa actual es del 65 por ciento y se llegaría a una tasa de 54 por ciento para 2021.
Sostuvo que para el año 2021, se reducirán las aportaciones de capital del Gobierno Federal a tan solo 38 mil millones de pesos.
Asimismo, aseveró que se contempla que la inversión pública se complemente con inversión privada, a través de contratos de servicios de largo plazo para la producción de petróleo (CSIEEs). Lo anterior permitirá que Pemex pueda contar con recursos para invertir en la producción de petróleo y en la recuperación de la capacidad de las refinerías.
A partir del año en que se alcance el equilibrio presupuestal, dijo, Pemex comenzará a generar excedentes que se podrán destinar al pago gradual de su deuda y para el financiamiento de programas y proyectos de alto impacto que detonen el crecimiento y el desarrollo económico y social del país.
Detalló que los resultados del modelo financiero arrojan que en el horizonte 2021-2030, el Gobierno Federal incrementaría la captación de recursos tributarios petroleros. Esta proyección demuestra el efecto positivo que tendrían los apoyos recibidos en el período de transición de la primera mitad de esta administración.
El Plan de Negocios de Pemex 2019-2023 fue aprobado por unanimidad en la sesión ordinaria 945 del Consejo de Administración de Petróleos Mexicanos, el cual está integrado por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, la Secretaría de Energía, la Secretaría de Economía, la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales, la Comisión Federal de Electricidad y los consejeros independientes.
En el marco de la misma sesión, en términos de lo que señala la Ley de Petróleos Mexicanos, se presentó y aprobó el presupuesto de la empresa para el año 2020, mismo que será enviado a la Secretaría de Hacienda para que sea considerado en la elaboración del Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación del próximo ejercicio fiscal.