INAH y Universidad de Gante de Bélgica firman Memorándum de Entendimiento en favor del patrimonio cultural/La colaboración inició con el mapeo de la reserva natural y ciudad prehispánica de Calakmul, y ahora harán estudios conjuntos para ampliar el conocimiento y difusión de Edzná. FOTO: Julio Bronimann, INAH.
CIUDAD DE MÉXICO, 21 de febrero del 2019.- La Secretaría de Cultura de México, a través del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), y la Universidad de Gante de Bélgica (UGante) firmaron un Memorándum de Entendimiento para desarrollar la cooperación académica en los campos de la conservación, capacitación e investigación del patrimonio cultural.
El documento fue signado este 19 de febrero, durante la ceremonia de firmas y condecoraciones de la Misión Económica de Bélgica en México, presidida por su Alteza Real, la princesa Astrid, en representación del rey Felipe de Bélgica, acompañada de la secretaria de Cultura de México, Alejandra Frausto Guerrero, y el embajador de Bélgica en México, Antoine Evrard.
El documento fue firmado por el director general del INAH, Diego Prieto Hernández, y la vicerrectora de la UGante, Mieke Van Herreweghe, en representación del rector Rik Van de Walle; y como testigo de honor el jefe del Departamento de Geografía de la UGante, Philippe De Maeyer.
La misión reúne alrededor de 200 participantes de los sectores empresarial, científico y cultural, así como diferentes ministerios de Bélgica que visitan México con el fin de establecer convenios que permitan desarrollar la cooperación económica, comercial y cultural entre ambos países.
En dicho contexto, y de conformidad con lo estipulado en el Convenio Cultural entre los Estados Unidos Mexicanos y el Reino de Bélgica que se firmó en la Ciudad de México, el 19 de noviembre de 1964, el INAH establece el presente compromiso con el propósito principal de fortalecer las bases para realizar actividades de cooperación para la conservación, capacitación e investigación del patrimonio cultural.
Con base en los principios de igualdad y beneficio mutuos, las partes se comprometen a intercambiar información en materia del patrimonio cultural; realizar acciones conjuntas de difusión del patrimonio cultural de México y Bélgica a través de publicaciones, documentales, uso de información y tecnologías de la comunicación.
Así como a establecer mecanismos que permitan la planeación, implementación y monitoreo de proyectos en temas de interés mutuo; promover y difundir los resultados de las actividades conjuntas que se desarrollen; e intercambiar expertos para compartir experiencias, información y buenas prácticas.
Asimismo, a dirigir estudios conjuntos para ampliar el conocimiento y la difusión de la Zona Arqueológica de Edzná, en el estado de Campeche, y a promover el desarrollo de las capacidades locales mediante la impartición de capacitación, actualización e intercambio de experiencias, tales como cursos, talleres y estancias.
La gran metrópolis maya de Edzná posee enorme riqueza de edificaciones y estilos, que dan idea del enorme poder político, económico y religioso que tuvo entre los años 600 y 1200 de nuestra era.
La UGante es una de las tres más grandes universidades flamencas, de longeva tradición entre las instituciones de educación superior en el mundo, fundada por el rey Guillermo I, hace más de dos siglos, ya que abrió sus puertas el 9 de octubre de 1817.
Los lazos que unen a Bélgica y México se remiten al siglo XVI y a través del tiempo se han expresado en múltiples formas; en específico con la UGante, a través de su Departamento de Geografía, la colaboración inició con el mapeo de la reserva natural y ciudad prehispánica de Calakmul, en Campeche, cuyos planos se integraron al expediente que México presentó para la inscripción del sitio, como Bien Mixto, a la Lista de Patrimonio Mundial.
La UGante cuenta con especialistas en geomática aplicada al estudio, registro y conservación del patrimonio cultural a través de nuevas tecnologías, como la obtención de imágenes satelitales y aéreas, así como topografía láser, que entre otras utilidades permiten detectar sitios con potencial arqueológico; además de drones y cámaras láser de alta resolución.
Combinando esas tecnologías, el resultado es un modelo virtual del sitio que se estudie, el cual se puede girar en todos sentidos —a 360 grados— y ampliarse, lo que permite el estudio detallado de cada estructura desde la computadora.