El salvamento arqueológico del proyecto es una oportunidad para la investigación científica y el uso de tecnología de punta en los 1,554 kilómetros de vía férrea/Las tareas de prospección y excavación se agilizan con metodología que emplea novedosas herramientas tecnológicas. FOTO: INAH.
Por Daniel Sánchez
CIUDAD DE MÉXICO, 31 de agosto del 2023.- El Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) informó que el salvamento arqueológico del proyecto Tren Maya ha dejado más de 58 mil monumentos registrados en superficie y 640 entierros recuperados.
Además, la dependencia federal precisó que gracias a estos trabajos, “se tienen nuevos datos sobre los distintos asentamientos de la cultura maya”, entre ellos la interacción de cholanos de Tabasco y Chiapas con yucatecos y el área de influencia de Calakmul en la Península de Yucatán.
“Al día de hoy, tenemos más de 58,000 monumentos registrados en superficie; hemos hecho la prospección arqueológica en 1,554 kilómetros; contamos con 7,060 sondeos por geotecnia; hemos intervenido 23,655 monumentos; el área excavada asciende a 2,602,529.95 metros cuadrados; de igual manera, contamos ya con más de 640 entierros recuperados y 649 piezas restauradas”, detalló el responsable académico del proyecto, Manuel Eduardo Pérez Rivas.
El arqueólogo añadió que ha sido gracias a este enorme trabajo, que hoy se tienen nuevos datos sobre distintos asentamientos de la cultura maya, lo que ha permitido retroalimentar varias hipótesis de investigación, como la posible interacción entre grupos cholanos de Tabasco y Chiapas con yucatecos, desde el periodo Clásico Temprano (300-600 años después de Cristo).
En el mismo sentido, destacó, “hemos podido corroborar planteamientos sobre la conformación de las esferas cerámicas y la interacción de estos grupos sociales en lo que hoy es el norte de Yucatán; al tiempo que, por ejemplo, también tenemos nuevos datos sobre el área de influencia económica y política de Calakmul hacia el oriente y poniente de la Península de Yucatán; y entender la caída de ciudades como Chichén Itzá y Mayapán”.
FOTO: Luis Peña/INAH
Pérez Rivas explicó que el salvamento arqueológico en el Tren Maya ha sido una oportunidad para la investigación, la cual, como todo proyecto de salvamento, debe ser aprobado por el Consejo de Arqueología del INAH, para lo cual cuenta con una estrategia y programación adecuada; además de un diagnóstico y una metodología para la excavación, el análisis de los materiales recuperados y su divulgación.
El investigador participó en una sesión extraordinaria del Seminario Patrimonio Cultural: Antropología, Historia y Legislación, con la mesa titulada “Tren Maya. El proyecto arqueológico”, moderada por el investigador de la Dirección de Estudios Históricos (DEH), Bolfy Cottom Ulim. La mesa también contó con la participación del coordinador del área de Escaneos en Tercera Dimensión, Cecilio Javier Cortés Arreola, y la titular del Centro INAH Campeche, Adriana Velázquez Morlet, quienes ofrecieron detalles sobre las labores arqueológicas realizadas en los mil 554 kilómetros de la ruta ferroviaria, la cual abarca los estados de Chiapas, Tabasco, Campeche, Yucatán y Quintana Roo.
Por su parte, Cortés Arreola expuso que en las labores de salvamento, a la par de las excavaciones, se incorporó el uso de tecnologías basándose en LiDAR, lo que ha permitido obtener datos precisos y detallados del terreno.
Asimismo, con el apoyo de la fotogrametría, los especialistas tienen la posibilidad de elaborar, a partir de una nube de puntos, modelados 3D con texturas, modelos digitales de terreno, ortomosaicos, filtros arqueológicos y recorridos virtuales de los monumentos y objetos que se restauran.
A la fecha, mencionó, el Proyecto de Salvamento Arqueológico Tren Maya ha generado más de 350 terabytes de datos e información descriptiva, cuantitativa y gráfica que, en el corto plazo, será consolidada y puesta a disposición del público especializado, a través de un repositorio digital auspiciado por el INAH.
El integrante del proyecto señaló que, dada su eficacia, este tipo de tareas continúan aplicándose en el registro de los espacios arqueológicos adyacentes a los tramos del Tren Maya, así como en los sitios que están siendo beneficiados como parte del Programa de Mejoramiento de Zonas Arqueológicas (Promeza).
A su vez, la arqueóloga Adriana Velázquez brindó una exposición sobre el acompañamiento que los Centros INAH de los estados por donde pasará el Tren Maya han tenido en este proyecto; principalmente en lo referente a las tareas de campo, a la discusión del trabajo arqueológico y al acercamiento con las constructoras, ejidos, comunidades y gobiernos municipales.
“El salvamento está relacionado estrechamente con el Promeza, y para el caso de Campeche tenemos trabajos en la Zona Arqueológica El Tigre, correspondiente al Tramo 1; en Edzná y Xcalumkín, del Tramo 2, así como en Calakmul, del Tramo 7. La información derivada de la investigación se está incorporando a la nueva señalética que se instalará en las zonas arqueológicas, lo que dará una nueva perspectiva de los sitios”, expuso.
Ha sido gracias al trabajo del INAH, apuntó Velázquez, que “quienes participan en el proyecto del Tren Maya, como instituciones y consorcios, han reconocido en la riqueza arqueológica de la región una fuente de conocimiento de su pasado y no un estorbo para el desarrollo”.