Las acciones de la Cámara de Diputados contribuyeron a restituir un aumento de 31,600 millones al Gasto Federalizado/Este órgano está comprometido con el fortalecimiento del federalismo.
CIUDAD DE MÉXICO, 4 de noviembre del 2019.- Con los ajustes a la Ley de Ingresos, se logró incrementar el monto del Gasto Federalizado que será destinado a Estados y Municipios, señaló el presidente de la Comisión de Presupuesto y Presupuesto y Cuenta Pública, diputado Alfonso Ramírez Cuéllar.
“La Cámara de Diputados tiene un importante compromiso con los gobiernos locales. Gestionamos ajustes a la iniciativa de la Ley de Ingresos para que los recursos adicionales pudieran ser utilizados, principalmente, para las necesidades prioritarias de los gobiernos estatales y los municipales”, explicó.
En ese sentido, de acuerdo con las nuevas estimaciones de la Secretaría de Hacienda, el Ramo 28 “Participaciones a entidades federativas y municipios”, tendría un incremento de 31 mil 600 millones de pesos, para quedar en un total de 951 mil 454.8 millones de pesos para 2020. Por su parte, el Ramo 33 “Aportaciones a entidades federativas”, ascendería a un total de 759 mil 750 millones de pesos.
El legislador recordó que los recursos del Ramo 28 pueden ser utilizados libremente por los estados y municipios, y para determinar el monto asignado a cada entidad se toman en cuenta elementos como el crecimiento del Producto Interno Bruto, el esfuerzo recaudatorio y el número de habitantes.
Las transferencias realizadas a través del Ramo 33 deben cumplir con objetivos definidos por el Gobierno federal en materia de educación, salud, seguridad pública e infraestructura educativa y social. Este Ramo se divide en fondos, cuyo monto se determina a partir de fórmulas establecidas en la Ley de Coordinación Fiscal.
Ramírez Cuéllar destacó la importancia de dotar a los municipios de los medios necesarios para cumplir con su función, puesto que constituyen el orden de gobierno con mayor cercanía a la población: “Podría decirse que de todos los servidores públicos, los presidentes municipales son los que tienen mayor sensibilidad a las necesidades de la gente. A ellos corresponde resolver, en primera instancia, los problemas de agua, alcantarillado, alumbrado público, seguridad, limpia pública, entre otros. En el nivel local es donde se reciben directamente los reclamos de la población. Los municipios del país tienen realidades y contextos totalmente diferentes, por lo que, en muchas ocasiones, resulta difícil diseñar, desde la Federación, políticas públicas adecuadas para todos”.
Afirmó que también es de suma importancia incorporar en el Decreto de Presupuesto de Egresos de la Federación 2020, un programa de saneamiento e inversión en infraestructura de estados y municipios, en el que se establezcan mecanismos de apoyo concretos para generar obra pública y reactivar las economías locales.
No obstante, la consolidación del federalismo fiscal implica una mejor gestión por parte de los gobiernos locales y un mayor compromiso con la transparencia y rendición de cuentas. “Los gobiernos locales deben asumir su responsabilidad y tomar en cuenta las recomendaciones de la Auditoría Superior de la Federación. En la Cuenta Pública 2017, el Gasto Federalizado fue el rubro con más observaciones, relacionadas con la mala aplicación de los recursos públicos, gastos injustificados, sobrecostos y opacidad en la asignación de proyectos”, manifestó.
En este sentido, el diputado destacó que es necesario revisar de manera integral el esquema de coordinación fiscal, para fortalecer la gestión municipal y, a la vez, definir de manera más clara las responsabilidades de cada nivel de gobierno, lo que incluye una mayor recaudación por parte de estados y municipios para evitar la gran dependencia que existe respecto a las transferencias federales.
“Es momento de poner las cartas sobre la mesa y convocar a una Convención Nacional Hacendaria para 2020, en la que se busque una distribución equitativa de los recursos públicos sin los incentivos perversos que en la actualidad tienen las fórmulas de participación y que, al mismo tiempo, impulse una verdadera responsabilidad tributaria por parte de los gobiernos locales. La consolidación de las haciendas públicas implica, necesariamente, una mayor recaudación por parte de los tres órdenes de gobierno”, concluyó.