Ambigú/¿Qué lección les dejó la guerra sucia de Rendón contra Lázaro?

Por Martha Elba Torres Martínez/SemMéxico

Como buen estratega propagandístico –entre los 10 más importantes del mundo, como lo ensalzaron conductores de noticias en Miami, donde radica-, logró su objetivo: revalorar su nombre y prestigio, a costa de uno de los precandidatos en México.

“Haré lo que esté a mi alcance dentro de la ley para que AMLO no llegue a la Presidencia”, reza la titular de la revista Líder México (http://www.revistalidermexico.com/web/index.htm) en su edición de enero, previa suscripción.

Como debía ser, el sábado 13, desde uno de sus recorridos, el precandidato de Morena protestó y exigió “a quienes contrataron a este publicista mercenario, que expliquen cuál es su estrategia, que se transparente este asunto; que los partidos, el PRI y el PAN, aclaren si lo contrataron” y pidió al INE que investigue “para cuidar que no se promueva la violencia política en el país”.

En las siguientes horas, los presuntos remitentes se desmarcaron. Enrique Ochoa negó que haya contratado los servicios del consultor venezolano; Pepe Meade: “no, que yo sepa” y su coordinador, Aurelio Nuño, no sabe ni quién es.

Pero también el tan odiado como temido en el mercado de la consultoría política, respondió: “los ataques que he recibido en mis redes sociales desde México durante las últimas horas sólo demuestran la intolerancia, odio, racismo, visceralidad e irracionalidad que Morena promueve en la política. Verifiquen… Hasta amenazas de muerte. Prueban mi punto! México es mejor que eso!”…

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Si Nuño no sabe quién es JJ Rendón, en Michoacán, sí. Hace 17 años.

Había sido contratado por el PRI, dirigido por Dulce María Sauri, para operar en las elecciones para gobernador en Baja California, Tabasco, Yucatán y Michoacán. Estos dos estados, de particular importancia para la lideresa.

El primero, por ser su tierra natal y el segundo, porque contendía nada menos que el nieto del General Lázaro Cárdenas del Río. En una coalición electoral nunca vista, Lázaro Cárdenas Batel contendió por el PRD, PT, Verde Ecologista y los desaparecidos Alianza Social (PAS) que sobrevivió apenas 6 años; del Centro Democrático (PCD), del difunto Manuel Camacho Solís, que duró solo el 2000 y Sociedad Nacionalista (PAS) de Gustavo Riojas, de 5 años.

Salvo algunas citaciones del paso de JJ Rendón por Michoacán, solo se pudo encontrar en Internet, apenas unas líneas de un artículo de Jaime Avilés (qdep), del 2001. El plan B ante pese a la premura, fueron las fuentes directas. En este caso, lo que me tocó ver y constatar y quien fue la responsable de comunicación en la campaña y luego vocera de Lázaro, la socióloga y psicoterapista, Alma Espinosa Menéndez…

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Si. “JJ” o el “venezolano” me resultaba intrigante. Joven, bajo de estatura, tez pálida y distante. Así se cubría intencionalmente, con un velo misterioso. Lo siniestro lo descubriríamos después. Lo vi algunas veces en solitario, en Casa de Gobierno. Preguntaba sobre él, y nunca conseguí detalles.

Solo que era un “asesor” venezolano en la campaña del PRI y el “que dicen que muy bueno”. Eso sí, cobraba en dólares y muchos. También en la casa de campaña de Alfredo Anaya Gudiño, Rendón era tan discreto que llamaba la atención y comenzó a figurar en columnas, pero siempre como acertijo.

En el cuarto de guerra de enfrente, tampoco había mayor información sobre este joven personaje.

Así lo recuerda, a 17 años, Alma Espinosa:

“Comenzamos a saber de él por lo que se decía en los medios; que había llegado un venezolano a apoyar la campaña del PRI y como ustedes, sin mayor información. Hay que considerar que en ese momento no se entendía el concepto de lo que era una campaña sucia. Pero con el tiempo, empezamos a ver que efectivamente había algo orquestado, con intención de denigrar, denostar y calumniar. Todo con el fin de que perdiera Lázaro la elección. Pero, lo que vino a hacer a Michoacán no le resultó, porque Lázaro ganó”…

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En el verano de 2001, practicantes de senderismo en lo que se conocía como la zona boscosa de Los Filtros Viejos, al sur de la ciudad, descubrieron una mañana, un macabro altar. Velas negras y restos de animales calcinados, así como signos dibujados con sangre sobre piedras, escandalizaron a la mocha Morelia.

El evento ni siquiera se investigó, pero cundió el rumor que eran los santeros cubanos que trajo Lázaro a Michoacán para hacerlo ganar. Una ofrenda a los orishas, “que de eso, mucho ha de saber la esposa”, sentenciaban lapidariamente sin ningún sustento. Cierto. Lo que se hizo con la pareja de Lázaro fue inmisericorde violencia política, de género, racista y hasta religiosa. Bueno, la criticaban hasta por su cuerpo estilizado.

Cuenta Alma: “a Lázaro lo señalaban de santero por la nacionalidad de Mayra Coffigny, y muchas calumnias se tejieron en su contra en toda una serie de campañas para dañarla. La denigraban, no solo por su origen, sino por su color. Hicieron escarnio de ella con crueldad, siendo una mujer bella, educada, fina y muy culta. Es una cubana muy generosa y por algo Lázaro la escogió como su compañera y madre de su hijo.

“Pero como es Lázaro. Pese a que se le estigmatizó a su familia por su origen, nunca se abrió a la confrontación; él es afecto a la plática, la conversación, a la sonrisa, incluso muy criticada –le decían la sonrisa Colgate-, pero bienvenida en toda la actividad política”, continúa.

“La campaña. ¿Cómo vivimos la guerra sucia que vino a hacer el venezolano? No hubo ninguna intención de contestar ni denunciar, porque sabíamos que eso lo harían otros menos tolerantes que Lázaro, y nosotros, continuar con el ritmo marcado, el de la propuesta, la no confrontación, no acusaciones. Incluso cuando comenzó su gobierno, haz de recordar, no hubo acusaciones para nadie.

¿Y los volantes?

-Le daba risa lo que decían y nos volteaba a ver con esa mirada de ¿Qué más van a hacer? Era una sonrisa enigmática, de estar viendo el volante y como diciendo ¿Y? Eran calumnias sucias y en origen muy perverso. (“El genio llamado JJ Rendón ha distribuido en Morelia y otras ciudades, unos volantes con fotografías en los que Lázaro aparece aporreando alegremente su jambé, pero el texto que acompaña a la imagen asegura que fue “captado mientras practicaba ritos de santería cubana, ligados a la magia negra, a los que acude desesperadamente para tratar de ganar la elección con ayuda de poderes malignos”: Jaime Avilés/2001)

¿Hubo en algún momento preocupación?

-Preocupar no, porque teníamos muestreos muy sólidos de que estábamos arriba. Pero si nos alertó que fuera a prenderse alguna mecha y que se saliera de control de todos. Porque tú sabes que a río revuelto… y eso sí se planteó como una posibilidad. ¿Qué hacer? Pues decidimos seguir y la prueba de toda esa guerra sucia, es que no sirvió para nada a los fines del PRI.

¿Nunca hubo algún acercamiento con el gobernador o el órgano electoral para parar la campaña sucia?

-Que yo supiera no. Si había propuestas en el equipo de presentar denuncia, pero no era una forma de ser de Lázaro, eso de aún no llegar y ya estar acusando. Pero acuérdate también que en el PRD había muchos radicales que morían por ir a prender un fuego, pero que yo sepa, con el gobernador, no se trató el tema…

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El supuesto atentado a Alfredo Anaya, fue otra treta de JJ Rendón en un intento por levantar a un caído candidato que se pegaba solito.

El 11 de octubre, un mes antes de los comicios, a la una de la tarde, sobre la carretera a Salamanca con rumbo a Morelia, a la altura del conubardo Tarímbaro, la camioneta en la que se trasladaba el candidato priísta con su chofer, fue impactada por cinco tiros de bala en la parte trasera, “desde un automóvil que se encontraba estacionado en la parte baja de la cinta asfáltica”, según el parte de la Procuraduría de Justicia del estado. Obvio, nunca se investigó, pese a que el mismo Cárdenas Batel exigió que se ahondara en el asunto para que no quedara impune, como otros tantos hechos de violencia que ya se registraban en la entidad.

La coordinadora de comunicación de Lázaro, da su versión:

“Estábamos en lo que era Hacienda Las Américas donde hablarían las esposas de los candidatos. De repente, comenzó a cundir el rumor de que Anaya había sufrido un atentado. Pasaban los minutos y nada. No apareció en el salón”.

¿Cómo lo tomaron?

-De inmediato, con preocupación. ¡¿Cómo?! ¡Un atentado a un candidato! Pero después de conocer más detalles y lo que todo mundo ya decía, que había sido falso, nos dio risa. Bueno, a Lázaro, no. Si nos preocupó, por lo que pudiera estar pasando en el estado. No había antecedentes y si tensó las campañas. Pero estuvo tan burdo el montaje que todos se burlaron, pero en ese momento, si preocupó.

¿Qué lección les dejó la guerra sucia de Rendón contra Lázaro?

-Ahora te diría que no solo fue ineficaz en ese contexto, sino que termina victimizando al destinatario y lo estamos viendo con AMLO, que lo relacionan con los peores dictadores y sigue arriba en las encuestas. Entonces, ya deberían pensar estos estrategas que ese tipo de campañas no logran su cometido, al contrario, le hacen un favor al otro. Lo peor es que caldean los ánimos, genera desconfianza, enojo, y esas emociones en la sociedad no son las adecuadas para progresar y confiar el uno en el otro. Al contrario, generan desconfianza, odio, afectando al propio proceso y a la democracia.

Pero así como en Michoacán, el venezolano tampoco dio resultados en Yucatán, la tierra de la Sauri de Riancho. Patricio Patrón Laviada, con la coalición PAN/PRD/PT/Verde, le ganó al priísta Orlando Paredes; en Baja California, Eugenio Elorduy triunfó con el PAN/Verde. En la elección extraordinaria de Tabasco, el priísta Manuel Andrade volvió a ganar, luego de que el Trife le anuló las votaciones en el 2000, pero no gracias a las artimañas de Rendón, sino al buen candidato.

Entonces ¿Por qué tanto miedo del Peje en JJ? A menos que sus cuates sudamericanos le calienten la cabeza. Que siga a Lázaro, él en lo suyo y ya…