Ante múltiples afectaciones por tormentas, 41 organizaciones sociales y comunitarias llaman a las autoridades federales y estatales de Campeche, Yucatán y Quintana Roo a aplicar 9 medidas urgentes y necesarias y reforzar a las comunidades para enfrentar contingencias por venir.
CAMPECHE, Cam. 14 de junio del 2020.- Unas 41 organizaciones sociales y comunitarias demandaron a autoridades federales y estatales de la Península de Yucatán que tomen en cuenta sus evaluaciones de daños y pérdidas por las lluvias de las tormentas tropicales “Amanda” y “Cristóbal”, impulsar una recuperación y reconstrucción que incluya soluciones resilientes y de larga duración y reforzar a las comunidades para enfrentar las contingencias por venir.
En un llamado al gobierno federal y a los gobiernos de Campeche, Yucatán y Quintana Roo, las agrupaciones civiles también exigieron aplicar nueve medidas urgentes y necesarias y realizar “los análisis que expliquen por qué estas inundaciones fueron más destructivas que otras similares en las tres últimas décadas, y el diseño y pronta implementación de acciones y obras preventivas, con la participación de los habitantes de nuestras comunidades”.
En su pronunciamiento, señalaron que “las intensas lluvias producidas entre el primero y el cinco de junio de 2020 por las tormentas tropicales “Amanda” y “Cristóbal”, nos dejaron múltiples afectaciones, tales como daños a carreteras, caminos y viviendas; pérdidas en las siembras de nuestras parcelas y nuestros traspatios (solares), pérdidas en nuestros apiarios; pérdidas de aves y cerdos de corral y de una parte de las infraestructuras productivas, todo ello en el entorno de la ya grave crisis generada por el largo confinamiento ante el Covid-19”.
Solicitaron que se tomen en consideración las evaluaciones de daños y pérdidas realizadas desde las organizaciones sociales y comunitarias, apoyadas en comités y en autoridades locales, con metodologías aceptadas por diversas agencias internacionales y el gobierno de México.
Manifestaron que hay que aplicar medidas, que consideran urgentes y necesarias, entre ellas garantizar la disponibilidad de medicamentos y servicios de salud en los centros comunitarios, para atender enfermedades que se intensificarán ahora, luego del paso de las tormentas (en la evaluación aparecieron las gastrointestinales, el dengue, etc.).
“Supervisar en la operación de albergues, la entrega de ayuda humanitaria, pago de transferencias directas de programas públicos, las medidas de sana distancia por la pandemia Covid-19. Reforzar la información culturalmente adecuada para mantener dichas medidas preventivas en las comunidades y cabeceras municipales”, indicaron.
“Ante el anuncio de que se intensificarán las fumigaciones para el control de moscos vectores del dengue y otras enfermedades, pedimos que éstas se sustituyan por un control integral preventivo y con ello, se reduzcan las fumigaciones para que no afecten a los polinizadores, ni a la salud de la población. Rechazamos por completo la posibilidad anunciada en algunos lugares de la Península de realizar fumigaciones aéreas, las cuales serán incluso combatidas legalmente”, apuntaron.
También plantearon construir la estrategia de recuperación y reconstrucción desde las capacidades locales e instaladas, garantizando que los fondos federales (Fonden, Fondo de Atención a Siniestros Agropecuarios) y estatales (de Yucatán, Quintana Roo y Campeche) lleguen de manera efectiva y prioritaria a las familias campesinas, y no a los grandes productores agrícolas.
“Apoyar a la recuperación de los saberes y las capacidades productivas locales, a través del fomento del aprovechamiento integral de los solares por medio del cultivo de variedades locales (criollas) y de animales de traspatio; y la recuperación de colmenas de abejas, respetando la diversidad biológica y cultural de cada región”, agregaron.
“Fomentar las economías locales, los trueques y la economía circular, evitando a la vez la lógica asistencialista. El rol de las autoridades en esta estrategia sería solo de autorizar el uso de lugares públicos adecuados y cuidar la aplicación de las medidas de sana distancia”, abundaron.
“Recuperar los saberes constructivos locales para la edificación de viviendas resilientes, bioclimáticas y dignas, privilegiando el uso de recursos locales y evitando la multiplicación de cuarterías inadaptadas al clima y a la cultura local”, añadieron.
Asimismo, pidieron controlar los grandes focos de afectación al medio-ambiente como las megagranjas porcícolas y avícolas, las grandes zonas de agricultura industrial, las empacadoras de alimento, en especial en cuanto a sus sistemas de manejo de desechos contaminantes y tóxicos, y en cuanto al uso y aplicación indiscriminada de insumos agrotóxicos, ya que en estos momentos, el manto freático y las corrientes superficiales están conectados directamente con las zonas inundadas y numerosa población está expuesta y vulnerables ante éstos.
“Impulsar programas comunitarios de prevención de futuras contingencias, incluyendo a los huracanes e inundaciones que en este año se esperan, así como fortalecimiento/vinculación de los comités comunitarios existentes, con las respectivas unidades de Protección Civil”, mencionaron.
Finalmente, reiteraron que no solo se procure la asistencia necesaria en este momento de emergencia, sino que se promueva que las comunidades y sus sistemas y organizaciones productivas, se refuerzan para enfrentar las contingencias de diferentes índoles y cada vez más recurrentes, por venir.
Entre los firmantes, destacan la Alianza Peninsular por un Turismo Comunitario, Alternativas en Salud y Desarrollo A.C., Bejkax Ha Kantemó S.C. de R.L., Bioasesores A. C., Biopakal SAPI de CV, Bioyucatán SA de CV, Cachitos – Chína, Chun Jabin de Xanabá, SC de RL de CV, Colectivo de Atención comunitaria U YUTZIL KAJ del Camino Real, Colectivo de Comunidades Mayas de Hopelchén, Consejo de Turismo Rural de Campeche A.C., Greenpeace México A.C., EDUCE AC, EDUCE Sociedad Cooperativa de RL, Estructurando Comunidades, entre otras.