Coordenada
Por Lupita Ramos
Diversas organizaciones feministas de Jalisco presentaron un documento en el Congreso del Estado, en el que exigen el reconocimiento de la paridad sustantiva en la integración de la Sala Superior del Sistema Estatal Anticorrupción en Jalisco y solicitan que la Convocatoria que emita el Congreso del Estado para designar la magistratura faltante se dirija solo a mujeres, para garantizar que la designación permita dar pasos para disminuir la brecha de desigualdad existente.
Señalaron en su pronunciamiento público que la construcción de la igualdad sustantiva y la paridad no se limita a emitir legislaciones en la materia, sino que debe incluir el compromiso firme y decisivo con la sociedad civil, para disminuir las brechas de desigualdad entre mujeres y hombres.
Expresaron que no se puede hablar de democracia con la ausencia de las mujeres en los espacios importantes del ejercicio del poder.
Las feministas exhortaron al Congreso del Estado y al Comité de Participación Social del Sistema Estatal Anticorrupción a promover como medida afirmativa que la magistratura de la Sala Superior del Tribunal de los Administrativo pendiente de designar, se le otorgue a una mujer de entre los perfiles profesionales de nuestra Entidad.
Solicitaron que se emita una convocatoria en la que solo compitan mujeres bajo procedimientos eficientes y transparentes. Lo anterior, atendiendo a la Recomendación General 33 de la Convención sobre la Eliminación de todas las Formas de Discriminación contra la Mujer (CEDAW), numeral 15, inciso F, de fecha 3 de agosto de 2015, donde el Comité recomienda a los Estados parte, que confronten y eliminen obstáculos a la participación de las mujeres como profesionales en todos los órganos y a todos los niveles de los sistemas de justicia como magistradas, juezas, fiscales, defensoras públicas, abogadas, administradoras, mediadoras, funcionarias judiciales y de justicia penal, especialistas, así como cualesquiera otras capacidades profesionales.
La paridad entonces debe entenderse como un instrumento para la transformación social y cultural de la sociedad y con ello lograr la igualdad real entre las mujeres y los hombres.
La paridad vino a completar el sentido de la igualdad sustantiva, la igualdad real entre mujeres y hombres en el ejercicio de los derechos civiles y políticos.
Finalmente, señalaron que el derecho a la no discriminación es en sí mismo un derecho independiente que no sólo reconoce la igualdad de las personas ante la ley, sino que garantiza el ejercicio de los otros derechos humanos contemplados en los cuerpos normativos nacionales e internacionales.
Esta última condición requiere que los tres poderes y órdenes de gobierno, protejan a las personas de la discriminación y se abstengan de realizar acciones discriminatorias.
Actualmente, el supremo tribunal de justicia está integrado por 34 magistraturas de las cuales 30 son ocupadas por magistrados varones y únicamente se han designado a cuatro mujeres magistradas.
El ahora tribunal de justicia de lo administrativo cuenta con seis magistrados en la primera sala y con la creación de la sala superior se han integrando dos hombres más, siendo un total de ocho integrantes masculinos, esta es la razón por la que se exige como acción afirmativa al congreso del estado que la magistratura faltante sea ocupada por una mujer.
La conformación del Sistema Anticorrupción en Jalisco requiere dejar de atenernos a la voluntad política de algunos para garantizar la participación plena de las mujeres. La convicción democrática de un Estado, debe estar en las acciones, no en los discursos.
@lupitaramosponc