Por lío limítrofe, Aysa amenaza con bloqueo a Tren...

Tres petroleras producirán 200,000 barriles diarios en 2024

20 febrero, 2020 Comentarios desactivados en Plaguicidas amenazan salud y vida en Península de Yucatán Campeche

Plaguicidas amenazan salud y vida en Península de Yucatán

Hay un elevado uso de plaguicidas altamente tóxicos en la Península, lo que se reflejará en graves problemas de salud en unos 10 o 15 años, advierte el investigador de la UAC, Jaime Rendón Von Osten. FOTOS: CCMSS.

CAMPECHE, Cam. 20 de febrero del 2020.- El investigador del Centro Epomex de la Universidad Autónoma de Campeche (UAC), Jaime Rendón Von Osten, señaló que en la Península de Yucatán ha proliferado, de forma acelerada, la agricultura extensiva y de monocultivos, como la soya o la palma de aceite, con un “uso intensivo de productos químicos, como fungicidas, herbicidas e insecticidas”.

“Todos son venenos, son productos químicos fabricados exprofeso para matar a un organismo y son peligrosos para quienes están expuestos al uso de estos compuestos y para quienes consumen productos que contienen estas sustancias”, advirtió.

Rendón Von Osten fue entrevistado para el Consejo Consultivo Mexicano de Silvicultura Sostenible (CCMSS), por Gerardo Suárez, e indicó que lo peor es que “debido al suelo kárstico de la Península de Yucatán, la infiltración de estos productos al subsuelo y su llegada a los cuerpos de agua es muy rápida, lo que pone en mayor riesgo la salud de las vidas silvestre y humana, dado el consumo de agua contaminada”.

Afirmó que prescindir de plaguicidas y otros agrotóxicos en sus cultivos en grandes extensiones de terreno no es una opción para las empresas que solo buscan la rentabilidad.

“Aunque la ciencia ha avanzado enormemente en métodos alternativos de control de plagas, como el control biológico y el manejo integrado de plagas, estás técnicas no han permeado en los empresarios de la agroindustria, quienes prefieren continuar con el uso de fórmulas y paquetes tecnológicos, a pesar de los daños que ocasionan”, expuso.

“No hemos dejado atrás los plaguicidas altamente tóxicos porque la ley permite el uso de estas sustancias altamente tóxicas o peligrosas, incluso cuando ya han sido prohibidas en otros países”, agregó.

“Un paso sustantivo que se tiene que hacer para reducir el uso de agroquímicos y pesticidas es generar un marco legal estricto que prohiba y sancione el uso de aquellos que son alta y moderadamente tóxicos. Así daremos los primeros pasos para avanzar hacia la adopción de sistemas de producción no contaminantes   en el campo”, aseguró

“Si no logramos cambiar la ley, no podremos avanzar mucho en el tema; la ley debe proteger el derecho de las personas a la salud y a un ambiente sano”, alertó y puntualizó que México debería comenzar por retirar y prohibir los plaguicidas que “ya fueron prohibidos en otros países. Pero no lo hace, por no afectar los ingresos de las empresas que los producen y los comercializan”.

Sobre los impactos en la salud de los campesinos de la región, Jaime Rendón reveló que “hay evidencia de que las comunidades y trabajadores que están muy expuestos a este tipo de productos, presentan un riesgo mayor de sufrir afectaciones a su salud. Podemos decir que a un mayor uso de plaguicidas, hay un mayor riesgo de aparición de enfermedades.”

“Dice el refrán mexicano: poco veneno no mata, pero sí enferma”, y “estamos hablando de mucho veneno que utilizan en las producciones agrícolas industriales. Si no es ahora, en algún tiempo veremos los efectos de la exposición a estas sustancias en grandes volúmenes”, insistió.

Sostuvo que las afectaciones a la salud humana por la exposición a los plaguicidas son similares a las que sufren las personas fumadoras: “no se ven los efectos al momento, pero en un periodo de 15 a 25 años, es muy probable que desarrollen un cáncer y el deterioro de su sistema respiratorio”.

“Si nosotros realizamos estudios para evaluar el impacto del uso de los agroquímicos en la salud en este momento, es probable que no haya una afectación tan grande, pero si hacemos estos estudios en unos 10 o 15 años, es probable que los efectos ya estén presentes a gran escala”, apuntó.

Dijo que le “tocó ver en Campeche personas que llegan a un pozo que satisface las necesidades de agua toda una comunidad, y ahí, junto al pozo, ponen un tambo de 200 litros, en el que preparan el coctel de plaguicidas, sin ningún tipo de protección, con huaraches, sin mascarilla; están muy familiarizados con esas sustancias y ni miden ni tienen conocimiento de las consecuencias de hacerlo”.

Glifosato y neoticonicoides

El experto manifestó que los plaguicidas neoticonicoides son muy dañinos para las abejas, aunque no para los humanos, y que su uso ha provocado una disminución considerable en la producción de miel por la muerte de las abejas. “Por eso debemos prohibir los neoticonicoides”, abundó.

“Dependiendo del modo de acción del plaguicida, cuándo ingresa al organismo puede irse a cierto tipo de órganos, tejidos y va a atacar a cierto tipo de células; y puede ser que el compuesto sea persistente y genere efectos ahí, o bien que dé el golpe y se degrade”, detalló.

Comentó que el glifosato tiene una vida media de 10 días, y el DDT tiene una persistencia de unos 10 años; pero en el caso del glifosato, el problema no es su vida media, sino las grandes cantidades que se están utilizando en la Península de Yucatán.

Citó un estudio piloto realizado en Noruega, en el que a toda una familia le suministraron alimentos producidos con agroquímicos durante una semana, y les tomaron muestras de orina, en las que aparecieron muchos residuos de metabolitos de estas sustancias; a la siguiente semana, a esa misma familia le dieron alimentos orgánicos y les tomaron las mismas muestras, y se vio como bajaban los residuos de plaguicidas en la orina.

“Es muy evidente que los alimentos orgánicos nos ayudan a reducir nuestro consumo de plaguicidas, es muy importante transitar a ese sistema de producción muy bajo o nulo en plaguicidas”, concluyó.

Consulta aquí la publicación original del CCMSS:

https://www.ccmss.org.mx/elevado-uso-de-plaguicidas-altamente-toxicos-en-la-peninsula-de-yucatan-se-reflejara-en-graves-problemas-de-salud-en-unos-anos-jaime-rendon/

 

Comparte esta nota:

Comments are closed.