Durante la temporada de anidación 2021, el personal de la Secretaría de Marina logró cuidar 178 nidos, de los que emergieron 19 mil 981 crías del quelonio.

Por Daniel Sánchez

CAMPECHE, Cam. 21 de octubre del 2021.- Además de sus labores de vigilancia y atención social, la Secretaría de Marina también realiza actividades de protección de nidos de tortuga en Cayo Arcas, en la Sonda de Campeche, y durante la temporada de anidación 2021, logró proteger 178 nidos, de los cuales emergieron 19 mil 981 crías.

La Armada de México informó que “a través de la Séptima Zona Naval, el pasado 15 de octubre, personal naval y de la Estación de Investigación Oceanográfica de Ciudad del Carmen, llevó a cabo la liberación de 223 crías de tortuga blanca” (Chelonia mydas).

Manifestó que esta es una de las actividades realizadas por la Estación de Investigación Oceanográfica de Ciudad del Carmen, luego de los recorridos para localizar a las hembras anidadoras, señalizar los nidos de tortuga, reubicar los nidos vulnerables, trasladar huevos que se encuentren en riesgo de inundación hacia el corral de incubación, su vigilancia permanente hasta la eclosión y liberación de las crías emergidas”.

Destacó que durante la temporada de anidación 2021, el personal perteneciente a dicha estación protegió 22 mil 571 huevos en 178 nidos, habiéndose liberado hasta la fecha un total de 19 mil 981 crías de tortuga blanca.

Recordó que la tortuga blanca está clasificada como una especie en peligro de extinción y arriba cada año durante los meses de junio a octubre a las playas del sistema arrecifal de Cayo Arcas, el cual se encuentra ubicado en el Golfo de México, aproximadamente a 190 kilómetros al norte de Ciudad del Carmen, razón por la cual se implementan los mecanismos necesarios para la protección y conservación de esta especie, que tiene un período de incubación de aproximadamente 55 días, desde el desove hasta la eclosión.

Asimismo, puntualizó, “con el fin de brindar mayor protección a las crías durante la liberación, ésta se realiza en horarios vespertinos y nocturnos para evitar que sean depredadas por otras especies, tales como aves y cangrejos, permitiéndoles alejarse de la costa hacia aguas profundas, donde tienen mayores posibilidades de supervivencia”.